martes, 30 de diciembre de 2014

Año nuevo

Puede que sólo un día al año nos toque festejar que seguimos aquí. Junto a los que siguen aquí. Puede que sólo un día al año los relojes del mundo se sincronicen y las copas de todas las casas y restaurantes decidan chocarse al unísono celebrando la llegada de nuevas posibilidades. Puede que sólo un día al año hagamos una lista de tareas y cambios y promesas, y que sólo un día al año comamos doce pasas al llegar la medianoche.

Pero aquí estamos. Pisando el año entrante y despidiendo al que se va. Algo nos dice que se acerca otra oportunidad para seguir soñando, para renovar energías, ilusiones, deseos. Para dejar atrás viejas rutinas y empezar a revivir las aventuras que hace tanto dejamos olvidadas. Algo nos dice que es la ocasión perfecta para seguir avanzando. Para saber que el tiempo continúa dándonos una palmadita en la espalda, empujándonos y obligándonos a ir hacia adelante.

Porque sí, porque estamos vivos. Por la simple y bendita razón de que estamos vivos...